Entradas populares

lunes, 18 de julio de 2011

HOLA CHICOS(AS) FANATICOS DE EL DEBATE CIBERNETICO,LES INVITO A VOTAR POR Mi blog EN LOS MEJORES BLOG PERUANOS.

sábado, 11 de junio de 2011

Testimonio contra la Mutilación Genital Femenina



La mutilación genital femenina es el término utilizado para referirse a la extirpación parcial o total de los órganos genitales femeninos. Su forma más severa es la infibulación, también conocida como circuncisión faraónica. El procedimiento incluye la clitoridectomía (por la cual se extirpa total o parcialmente el clítoris), la excisión (extirpación de la totalidad o parte de los labios menores) y la ablación de los labios mayores para crear superficies de carne viva que después se cosen o se mantienen unidas con el fin del que al cicatrizar, tapen la vagina. Se deja una pequeña abertura para permitir el paso de la orina y del flujo menstrual.

En algunas ocasiones se celebra una ceremonia pero sin que tenga lugar la mutilación de los genitales. El ritual puede consistir en empuñar un cuchillo junto a los genitales, pinchar el clítoris, cortar algo de vello público...

Algunas mujeres sufren la mutilación genital individualmente, pero con más frecuencia se lleva a cabo en grupo.

El grado de conocimiento sobre la mutilación varía. A veces el acontecimiento se asocia con festividades y regalos.

Se exhorta a las niñas que sean valientes.

La mujer es inmovilizada generalmente por ancianas, con las piernas abiertas. La mutilación se lleva a cabo utilizando un cristal roto, la tapa de una lata, unas tijeras, la hoja de una navaja u otro instrumento cortante. Cuando se trata de una infibulación, se utilizan espinas o puntos para unir ambas partes de los labios mayores, y las piernas pueden permanecer atadas hasta 40 días.

La mutilación genital puede provocar la muerte. En el momento en que se lleva a cabo, pueden presentarse dolores, conmoción, hemorragias y daños en los órganos que lo rodean el clítoris y los labios.

El primer acto sexual sólo pude realizarse después de la dilatación gradual y dolorosa de la abertura que ha quedado tras la mutilación. En algunos casos, es necesario practicar una incisión previa. Algunas recién casadas sufren graves heridas a causa de incisiones mal realizadas por sus esposos.

En el parto normalmente es necesario practicarles un corte para permitir la salida del niño, tras el alumbramiento, a menudo a las mujeres les vuelven a practicar la infibulación.

Las mutilaciones revelan sentimientos de ansiedad, terror, humillación y traición, la mujer es especialmente vulnerable a los problemas psicológicos, al estar atrapadas en las normas sociales de su comunidad y las de la cultura mayoritaria.

La mutilación genital se practica debido a una identidad cultural, sexual y religiosa.

La costumbre y la tradición son, con diferencia, las razones más invocadas para explicar la mutilación genital ya que define quién pertenece al grupo, se considera que es un hábito tan normal que no pueden imaginarse a una mujer que haya sido sometida a la mutilación.

También se considera necesaria la mutilación para que la niña sea plenamente considerada como mujer. Se cree que la ablación del clítoris y de los labios incrementa la feminidad, término que a menudo es sinónimo de docilidad y obediencia.

A menudo se invoca a la religión como una de sus razones.

El Corán no contiene ningún llamamiento a favor de la mutilación genital femenina pero algunos proverbios se refieren a ella.

Es escalofriante la tortura a la que están sometidas estas mujeres y podemos hacernos una idea con el siguiente testimonio:

“Me condujeron a una habitación muy oscura y me desvistieron. Me vendaron los ojos y me dejaron completamente desnuda... Cuatro mujeres fuertes me obligaron a tumbarme boca arriba; dos de ellas me sujetaron con fuerza cada pierna. Otra se sentó sobre mi pecho para impedir que moviera la parte superior de mi cuerpo. Me metieron a la fuerza un trapo en la boca para que dejara de gritar. Entonces me rasuraron. Cuando comenzó (la mutilación), opuse mucha resistencia. El dolor era terrible e insoportable. Durante este forcejeo, recibí cortes graves y perdí mucha sangre. Todos los participantes... estaban medio borrachos.”


Las peores tonterias de los famosos

sábado, 21 de mayo de 2011

La Grulla Agradecida

Erase una vez había un joven que vivía solo en una casita al lado del bosque. De regreso a casa durante un día de invierno bastante nevoso, oyó un ruido extraño. Se puso a caminar hacia un campo lejano de donde venía el sonido, y allí descubrió una grulla tumbada sobre la nieve llorando de dolor. Una flecha incada en la ala tenía, pero el joven, muy cariñoso, se la quitó con mucho cuidado. El pájaro, ya libre, voló hacia el cielo y desapareció.

El hombre volvió a casa. Su vida era muy pobre. Nadie le visitaba, pero esa noche a la puerta sonó un frap-frap-frap. "¿Quién será, a esta hora y en tanta nieve?" pensó él. ¡Qué sorpresa al abrir la puerta y ver a una mujer joven y bonita!

Ella le dijó que no podia encontrar su camino por la nieve, y le pidió dejarla descansar en su casa, para lo cual él fué muy dispuesto. Se quedó hasta el almanecer, y tambien el día siguiente.

Tan dulce y humilde era la mujer que el joven se enamoró y le pidió ser su esposa. Se casaron, y apesar de su pobreza, se sentían alegres. Hasta los vecinos se alegraban de verlos tan contentos. Pero el tiempo vuela y pronto llegó otro invierno. Se quedaron sin dinero y comida, tan pobres como siempre.

Un día, para poder ayudar un poco, la mujer joven decidió hacer un tejido y su marido le construyó un telar detras de la casa. Antes de empezar su trabajo ella pidió a su marido prometerla nunca entrar al cuarto. El lo prometió. Tres dias y tres noches trabajó ella sin parar y sin salir del cuarto. Casi muerta parecía cuando la mujer joven por fin salió, pero a su marido le presentó un tejido hermoso. El lo vendió y consiguío un buen precio.

El dinero les duró bastante tiempo pero cuando se acabo todavía seguía el invierno. Ya que, otra vez se puso a tejer la mujer joven, y otra vez su marido le prometió no entrar al cuarto. Fueron no tres sino cuatro dias cuando ella, viendose peor que la vez siguiente, salió del cuarto y le dió a su marido un tejido de tan gran maravilla que, al venderlo en el pueblo, consiguierón dinero suficiente para dos inviernos duros.

Mas seguros para el futuro que nunca, desafortunadamente el hombre se hizo avaro. Tormentado, tanto por el deseo de ser rico como por los vecinos siempre preguntandole que cómo se podía tejer sin comprar hilo, el joven le pidió a su señora hacer otro tejido. Ella pensaba que tenian bastante dinero y que no habia necesidad, pero el avaricioso no dejaba de insistir. Puesto que, después de recordarle a su marido la promesa, la mujer se metió en el cuarto a trabajar.

Esta vez la curiosidad no le dejaba al hombre en paz. Ignorando su promesa, fué al cuarto donde su señora trabajaba y abrió un poquito la puerta. La sorpresa de lo que vió le hizo escapar un grito. Manejando el telar estaba no su señora sino un pajaro hermoso, cual de las plumas que se iba arrancando de su propio cuerpo hacia un tejido igualmente hermoso. Cuando el pajaro, al oirle gritarr, se dió cuenta de que alguien la miraba dejó de trabajar y de repente su forma se convirtio a la de la mujer joven.

Entonces, ella le explicó su historia, que ella era esa grulla cual él ayudó y que, agradecida, se convertió a mujer, y que empezó a tejer para ayudarle no ser pobre, esto a pesar del sacrificio que tejer con las plumas de su propio cuerpo le costaba. Pero, ahora que él sabía su secreto, tendrían que dejar de ser juntos. Al oir esto, el prometió que la quería más que todo el dinero del mundo, pero ya no habia remedio. Cuando acabó su historia, ella se convirtió a grulla y voló hacia el cielo.

Fin.